La Alhambra. La mirada cautiva y la razón trabada
ponencia gratuita.
Ponente:
Ponente: Diego Blanca Robas. Licenciado en Geografía e Historia, especialista en Historia del Arte por la UCM.
Descripción:
Reza una inscripción de La Alhambra: ¡Oh tú que entras!, por Dios, detente y contempla el esplendor de esta maravillosa y perfecta belleza...donde la mirada es cautivada y la razón trabada...Yo soy el Jardín que la belleza adorna.
La Alhambra, efectivamente, cautiva los sentidos de quienes la visitan. La mirada queda cautiva ante su belleza, como el oído por el rumor del agua o el olfato por las mezclas de los perfumes de sus plantas. Pero tras todo ello hay algo más.
Aquella belleza que apela a lo sensible se apoya en la geometría, en el número, en las proporciones, en la filosofía. En sus propuestas se recrean distintos niveles de realidad, la concreta y la especular, la física y la metafísica.
Entre sus formas se esconden poemas que hablan del mundo, del paraíso, de la Belleza platónica.
Por eso, La Alhambra, también, traba a la razón, la estimula a través de los sentidos para retarla a ir más allá de lo que se ve.