“El machismo se reproduce, se regenera, se repara, aprende y vuelve”
Luis Miguel Belda García
Director de Comunicación del Grupo Educativo CEF.- UDIMA
Entrevista a María Marcela Lagarde
¿Qué explica este resurgimiento del feminismo como referente social?
Aunque no se diga, ha habido un empoderamiento del feminismo. Antes estaba como oculto. Todo se decía a favor de la igualdad, pero la palabra feminismo casi no se usaba, y ahora es materia de debate en la asamblea, los chavos y chavas están de acuerdo con ser feministas. Eso es maravilloso.
A pesar de los cual siguen muriendo miles de mujeres en todo el mundo por violencia contra la mujer.
Yo he visto en Buenos Aires manifestaciones gigantescas contra el feminicidio. Allí se dice “ni una menos”; en México decimos “ni una más”, pero nos referimos a lo mismo. No queremos más muertes.
¿Por qué el machismo es tan difícil de combatir?
El machismo siempre se repone. Es una cualidad que tiene la cultura patriarcal. Se reproduce, se regenera, se repara, aprende y vuelve. Es así y nosotras damos con el tiempo, con la época, con los grandes problemas nacionales. Ahí está el mundo feminista, en todas partes. En México acabamos de obtener un proceso electoral único, nadie dijo que hubiera habido fraude. Tuvieron que aceptar que ganó la izquierda, con muchos votos, y eso es un impulso muy bueno a un país como México, tan hastiado de tanta violencia y feminicidio. Los grupos diversos hemos planteado estos problemas, a veces con menos éxito, a veces nos va mejor. Pero ahora resulta que todo esto se plasmó en las elecciones. Tenemos una gran perspectiva. Ojalá lo hagamos lo mejor posible.
¿Se imagina un mundo donde la igualdad entre hombres y mujeres deje de ser una reivindicación?
No me muestro optimista a que haya más y mejor igualdad en el corto y medio plazo. Porque es imposible. La igualdad será el resultado de fenómenos que deben cambiar antes de que confluyan en que pueda haber igualdad, por ejemplo, igualdad jurídica. Tenemos que revisar todas las leyes y normas, los protocolos, los reglamentos. Todo para dejar en cada país una normativa no patriarcal. Pero saldrán nuevos partidos enloquecidos que defienden las cosas más radicales de la derecha. El tema es que el feminismo toca todos los aspectos de la vida, de la sexualidad, del trabajo, de la familia, de la comunidad… la política en México, por ejemplo, reformamos cosas, incluimos la paridad como un contenido hacia la igualdad. Yo fui constituyente en la Ciudad de México, hicimos una nueva constitución para la ciudad, fuimos 100 legisladores, de ellos 50 mujeres y 50 hombres. Nunca he trabajado más cómoda en un ambiente tan bueno generado por ellas y ellos, nosotras y nosotros. Desde luego primero hicimos una red feminista las mujeres en una mayoría de los partidos. Teníamos agenda propia y la fuimos construyendo juntas, y eso me encantó. De lo que no estábamos de acuerdo, no hacíamos bronca; lo que queríamos era sumar esfuerzos. Y lo logramos, una constitución democrática, del siglo XXI con los grandes temas, las rentas básicas, el desarrollo sustentable… temas que llevamos 25 años debatiendo y ahora fue el momento.
Frente al feminismo y el progreso social, como usted mismo dice, hay reacción, no solo social, también política.
Estoy muy preocupada. Me da mucha pena esa forma de la política en Ecuador, que es casi religión. Me parece muy peligroso con Trump en la presidencia de Estados Unidos, porque hablar de América Latina es hablar de Trump. Y ojo, el muro de Trump ya estaba casi listo. Obama le puso sus ladrillos. Todos los líderes demócratas a los que queremos tanto pusieron su valla de acero y ya Trump vino a hablar de algo que no era suyo. Tenemos que decir que el muro no es de Trump y desprestigiarlo.
