La Estación del Norte de Valencia cumple 100 años
ARTE
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La Estación del Norte de Valencia cumple 100 años. Se trata de un logro monumental para su época que encarna todas las peculiaridades del Modernismo. Su construcción se inició en 1907 y fue terminada en 1917. Situada en pleno centro de la ciudad, esta obra llevada a cabo por el destacado arquitecto Demetrio Ribes (Valencia 1875–1921), se configura como un espacio arquitectónico en el que la ornamentación y el mobiliario forman un conjunto indisoluble con la construcción en sí misma. Si el propio edificio ya es llamativo, el interior del mismo presenta una decoración exuberante realizada en madera, mosaicos, cerámica, etc. con numerosos motivos alegóricos de la huerta valenciana. El conjunto total resulta de una belleza espectacular.
La página web de Adif detalla en una reseña histórica de la estación, cómo el punto de partida de la construcción de la misma eran los manifiestos del movimiento de finales del siglo XIX, Arts and Crafts, que propugnaba la máxima, “la totalidad del entorno humano, una obra de arte".
La estación consta de tres naves en paralelo, estando situada la fachada en la nave central. Es de destacar la cubierta, que fue un avance tecnológico de primer orden, al estar apoyada en elementos mínimos. Fue construida en Madrid por el ingeniero Enrique Grasset, y. llevada posteriormente a Valencia. El documento citado de Adif señala, “Con una altura de 24,5 metros y 45 de luz, la marquesina se encontraría sobreelevada respecto a las alas laterales para incluir una banda de ventanales practicables electrónicamente, cuyo objetivo era incrementar la ventilación, reduciendo los efectos del vapor de las locomotoras que entrasen en sus seis vías”.
No fue la Estación del Norte la única que construyó, también son obra de Ribes la estación de Príncipe Pío de Madrid y la del Norte de Barcelona.
Ribes construyó innumerables obras civiles e industriales, que aún hoy pueden ser contempladas en diversos puntos de la ciudad y en otros puntos de la geografía española. También en Valencia dirigió la construcción de almacenes, garajes, etc. de acuerdo con las necesidades de la ciudad, que estaba en plena expansión económica y social. Inició el uso del hormigón armado en la región valenciana utilizándolo en la construcción de los docks comerciales del puerto.
También asesoró a los autores de uno de monumentos más visitados de la ciudad, el Mercado de Colón, y fue autor de un buen número de viviendas privadas, especialmente en la Ciudad Vieja y en el Ensanche, donde las grandes familias burguesas que propiciaron el desarrollo de la ciudad trasladaron su residencia. Muchas de esas espléndidas viviendas aún pueden ser contempladas. Otras, lamentablemente, fueron derruidas.