"No creo en el abogado estrella, creo en el equipo"

Entrevista. DAVID FERNÁNDEZ. Socio director de Sala & Serra Abogados

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Tras licenciarse en Derecho, David Fernández (Madrid, 1971) acudió al CEF.- en busca de orientación. Allí encontró a Roque de las Heras,  según sus propias palabras, su “padre profesional”, quien le introdujo en el mundo de los impuestos. Un mundo que no ha dejado de apasionarle y que le ha llevado a alcanzar altas cotas profesionales, hasta el punto de llevar a su despacho Sala & Serra a competir con la grandes firmas de abogados de nuestro país y hasta con las célebres Big Four.

¿Puede hablarnos de su paso por el CEF.-?

Comencé opositando al Cuerpo de Interventores de la Administración Local. Aprobé los dos primeros exámenes, y antes de presentarme al tercero me surgió una oportunidad de ser el hombre de confianza en materia legal y fiscal de un gran grupo familiar. Más tarde hice el Máster de Tributación/Asesoría Fiscal  y al terminar Roque de las Heras me ofreció la posibilidad de impartir clases en ese mismo Máster.

“La oposición y el Máster me permitieron adquirir mucha base técnica y a comprender los entresijos de todo el sistema tributario”

¿Qué le aportó esa experiencia?

Al CEF.-, y a Roque de las Heras en particular, les estaré eternamente agradecido porque me orientaron perfectamente en un momento, recién acabada la carrera, en el que yo no sabía muy bien hacia dónde encaminar mis pasos. La oposición y el Máster me permitieron adquirir mucha base técnica y  comprender los entresijos de todo el sistema tributario. Más tarde, ya de profesor, me fui adentrando en las distintas áreas de la fiscalidad: tributación de no residentes, auditoría fiscal, impuesto de sociedades, etc.

¿Se podría decir que es un fiscalista “nato”?

Yo prefiero considerarme un fiscalista “todo terreno”, un profesional que aborda todas las áreas de la fiscalidad. Es un perfil muy apreciado por los clientes, ya que te permite tener una visión de la empresa muy completa. Estratégicamente aportas bastante valor a la hora de tomar decisiones, te conviertes casi más en empresario que en técnico fiscal.

¿Cuál es la estrategia que sigue  Sala & Serra?   

En 2007, poco antes de llegar la crisis, tomamos una decisión estratégica que ha resultado un éxito. Nos posicionamos en temas complejos: precios de transferencia, defensa de responsabilidad civil en administradores, reclamaciones de cantidades importantes, conflictos entre socios en grandes empresas, internacionalización, concursos…  Asuntos de envergadura que normalmente  las empresas no pueden gestionar pos sí solas y para los que se necesita un alto grado de experiencia y especialización. 

Habrá algún otro secreto para su éxito…

La clave está no solo en ofrecer ese servicio complejo sino en hacerlo a un precio razonable, y eso sólo se consigue atando muy bien los costes. Nuestra filosofía es que no hace falta cobrar precios astronómicos para dar un servicio de primer nivel. Por poner un ejemplo, preferimos no tener la oficina en la mejor calle de Madrid si así evitamos repercutirle un coste extra al cliente. Nuestro modelo es el de no endeudarnos para crecer, el ir poco a poco y con los pies en el suelo. Es una manera de entender la vida que he aprendido de mi familia castellana. Un modelo muy estilo CEF.-

Uno de esos temas complejos a los que aludía anteriormente son los concursos, muy de actualidad en estos tiempos. ¿Cuáles son las claves de estos procedimientos?

En el despacho tenemos cuatro abogados concursalistas de gran experiencia. Y en mi opinión, más que en el hecho en sí de llevar concursos, el gran valor añadido de estos profesionales radica en su labor preventiva, en su capacidad para asesorar a consejeros y administradores de empresas en situación cercana a la iliquidez o posible insolvencia inmediata. Son empresas que ya se encuentran en una situación muy delicada, previa al concurso. En esas circunstancias, tener un buen abogado que te oriente  sobre qué medidas o precauciones adoptar antes de llegar a una situación irreversible es crucial.

¿Cómo están viviendo las muchas reformas legislativas  que se han producido recientemente?

Es cierto que se han producido cambios, y no recuerdo un Gobierno que haya legislado más que el actual. Pero a los cambios legislativos te adaptas rápidamente. Los lees en el BOE y los asimilas. Cuando ya tienes un cierto nivel profesional y una experiencia, no se trata tanto de estudiarse la norma sino la jurisprudencia, las consultas tributarias de la dirección general de tributos.  Las clases que más aprecio son las que explican jurisprudencia no la Ley, por eso yo intento hacer lo mismo.

¿Están las firmas de abogados un tanto anquilosadas?

No estoy seguro de que “anquilosadas” sea la palabra, pero sí es cierto que a veces son demasiado tradicionales. Mi primer despacho también tenía un planteamiento muy  de la vieja escuela. Estaba totalmente basado en mi marca personal, hasta el punto de que si entrabas en la página web, lo primero que te encontrabas era mi cara ocupando toda la pantalla. Fue un error porque con modelos tan personalistas es imposible crecer. No creo en los abogados estrella. Creo en el equipo.

“Atando bien los costes, no hace falta cobrar precios astronómicos para dar un servicio de primer nivel”

¿Y cómo escapa Sala & Serra de esos planteamientos tradicionales?

Con algo tan simple como aplicar a una firma de servicios jurídicos herramientas de gestión empresarial que han tenido éxito probado en otros sectores. Desde un software de gestión interno, a un presupuesto de tesorería actualizado, con control detallado de los gastos e inversiones, pasando por técnicas de  marketing online, comunicación, etc. Además, hoy en día existen nuevas formas de comunicación como las redes sociales que es necesario dominar, ya que de otro modo pierdes oportunidades.

¿Qué papel juega la formación en el sector jurídico?

La formación lo es todo. En el sector servicios o estás formándote continuamente o estás perdido. En nuestro despacho el 80% del equipo es personal senior, con una formación muy sólida a sus espaldas. Esa formación continua es una de las razones de nuestro éxito y es la que nos ha permitido posicionarnos en temas complejos. En mi caso, la formación me permitió especializarme en el mundo de los impuestos primero, y más tarde abrirme a otros campos como el concursal desde la perspectiva financiero contable, reestructuraciones o management.

Por último, ¿es esta crisis una oportunidad?

Creo el error estriba en seguir pensando en términos de crisis. Según lo veo yo, no es que estemos en crisis, sino que debemos asumir que este es, ni más ni menos, el mercado que nos toca vivir. O lo asumes y tomas medidas o lo pasarás mal. No queda más alternativa que adaptarse, reestructurar, alinear el producto al mercado y al cliente.