La novela dela Bolsa (Capítulo 67)

EL SÍMBOLO

Hamilton Jones


123rf

Los protagonistas encuentran un proyecto realista y viable, sobre el que trabajar y poder ayudar a la sociedad, modificando un misterioso programa informático, dedicado en sus orígenes a la Bolsa,  para que pueda emplearse en una de las facetas más necesarias en la actualidad, como es la de la Dirección Empresarial en general y la del emprendimiento en particular. En este capítulo el narrador habla de los avances efectuados en “YouTube” para dar a conocer el nuevo programa informático y su compañero le comenta su descubrimiento del, según él, “intríngulis” de la Física cuántica en su reciente viaje a Viena.

Tres meses habían pasado cuando volví a reunirme con Ballestá. Durante ese tiempo estuve en contacto con la empresa propietaria de un antiguo programa dedicado al análisis informatizado de gráficos bursátiles, para adaptarlo al análisis de curvas y gráficos de cualquier tipo, cosa que se consiguió sin mucho esfuerzo. El nuevo programa no era ya un problema, el problema estaba centrado en cómo darlo a conocer  urbi et orbi sin morir en el intento, y en esas estaba cuando apareció un radiante Ballestá de regreso de su último viaje.

-Caramba, qué bien te veo Ballestá -exclamé. -Estoy contento, vengo de Viena y he descubierto algo que te dejará patidifuso -contestó,  y añadió -Venga, te invito a comer en el Balneario Vila de Caldes.

El restaurante del balneario lo habían transformado en una hamburguesería de lujo, que era lo que le gustaba, y comió como un poseso.

-Viniendo de Viena supongo que te habrás atracado de panecillos de Viena.

-Qué va, allí no saben ni lo que eso, alguien se habrá inventado ese nombre porque los pedí, incluso los busqué en varias panaderías con una amiga austríaca y no sabían de lo que les hablaba. Bueno, vamos a lo nuestro. Agárrate porque he descubierto en Viena el intríngulis  de la física cuántica.

Como conozco a Ballestá y antes de que me soltara cualquier rollo de los suyos, ya que no sabe casi nada de física, intenté explicarle lo que habíamos avanzado con la empresa propietaria del nuevo programa informático para analizar de cualquier tipo de gráfico, pero me fue imposible ya que él iba a lo suyo y me resigné a escucharlo. Empezó diciendo…

-¿Te acuerdas de los viejos tiempos, cuando nos reuníamos con el bolsista Rivera, el físico Iraza, el “alquimista” Santos y nosotros dos en el Balneario?

-Claro que me acuerdo, y qué -le respondí.

-Pues que a mí me quedaron clavadas dos cosas de Iraza sobre la física cuántica totalmente incomprensibles y que sonaban a majadería, pero que experimentalmente resultaba que eran ciertas.

-La primera era que una partícula podía girar en el sentido de las agujas del reloj y al mismo tiempo en sentido contrario, es decir que  giraba en ambos sentidos al mismo tiempo. La segunda era el asunto aquel de las rendijas en el que, si no miraba nadie, la misma  partícula pasaba por las dos rendijas a la vez.

-Desde que lo contó Iraza, me he pasado media vida intentando entender eso, hasta que de repente, en el Prater de Viena, concretamente viendo girar la noria lo entendí de golpe. Resulta que viendo la noria por un lado se aprecia que gira en el sentido de las agujas del reloj, pero viéndola por el otro lado se aprecia que gira en sentido contrario a dichas agujas y sin embargo es la misma noria; luego cuando nadie la observa, es decir, si se  prescinde del observador, en realidad la noria gira en los dos sentidos al mismo tiempo.

-Caramba, pues tienes razón -exclamé, y añadí- es al observarla cuando colapsa la realidad del giro en ambos sentidos a la vez y se  transforma en un giro único. ¿Qué sentiste cuando lo entendiste?

-Una inefable sensación como no sentía desde la infancia y creo que los demás me tomaron por loco, porque en vez de exclamar eureka, que  es lo clásico, me puse a entonar el Pange lingua. Anímicamente me trasladé a mi infancia de monaguillo.

Y ni corto ni perezoso se puso a cantar en medio del restaurante y encima le aplaudieron al terminar…

                                                  Pange lingua gloriosi

                                                  Córporis mystérium

                                                  Sanguinísque pretiosi

                                                  Quem in mundi prétium                          

Cuando terminaron los aplausos le pregunté…-Y el asunto del efecto cuántico de las dos rendijas que me hablaste antes, aquello de cómo es posible que una misma partícula pase por las dos ranuras a la vez.

-Eso lo dilucidé después, en el viaje de regreso, pero es más de lo mismo, ya que en vez de tratar sobre un problema de sentidos de giro, se trata de un problema de derecha o izquierda.

-Ahora no te sigo -le contesté.

-Sí hombre, se trata del panel sobre el que se han practicado las dos rendijas cercanas una al lado de la otra, es decir una a la izquierda  de la otra y otra a la derecha de la anterior.

-Vale, lo entiendo -repliqué, y me contestó…

-Pero eso es así si miras el panel por una cara, pero si lo miras por la otra cara, la rendija derecha queda ahora a tu izquierda y la que antes estaba a la izquierda ahora quedará a tu derecha y como la naturaleza cuántica prescinde del observador, pues resulta que no  le queda más remedio que pasar por ambas rendijas a la vez, porque esa es la realidad si no interviene observador alguno. -Y añadió…

-Ese es todo el intríngulis de la física cuántica. El observador colapsa el estado de la verdadera realidad total, para convertirla en otra realidad, la realidad parcial del observador.

Ballestá lanzó un suspiro y se repantigó en su silla en plan beatífico.

Reflexioné unos breves instantes y apostillé…

-Pero eso tiene más alcance de lo que dices, porque también sucede con el movimiento de los cuerpos, por ejemplo si un avión del ejército vuela a velocidad constante y deja caer una bomba, los ocupantes del avión verán que cae con trayectoria vertical, tal se puede ver en películas de bombardeos, y sin embargo los observadores terrestres lo que ven es que cae siguiendo una trayectoria parabólica, es decir que al soltarse del avión la bomba primero se mueve casi paralelamente al mismo y poco a poco curva su trayectoria hasta dibujar una parábola. La pregunta es: ¿Cuál es en realidad el movimiento del proyectil vertical o parabólico? y la respuesta siempre ha sido… depende de dónde esté situado el observador, pero según tu intríngulis la respuesta es: la bomba sigue todas la trayectorias que se puedan observar al mismo tiempo y a la vez.

Ballestá salió de su pseudoletargo y exclamó, -por eso en la física cuántica, que prescinde de los observadores, se dice que una partícula sigue y pasa por todas las trayectorias posibles a la vez. Fin del problema. Bueno que me querías contar tú del nuevo programa informático, lo tenemos todo por fin o qué.

Le contesté que el nuevo programa ya funcionaba y que también se habían colgado cinco pequeños videos explicativos en YouTube, mientras se estaba a la espera de construir una web exprofeso para el programa.

-Dime cómo se accede a los videos,- preguntó.

-Muy sencillo, entras en YouTube y escribes “leotaber” en el cajetín de búsqueda y te saldrán, pero si quieres verlos ordenados del uno al cinco presionas sobre el nombre “canal” que te saldrá en primer lugar debajo del título Leo Taber International y ahí te saldrán  ordenados. Es aconsejable que los veas por orden, del primero al quinto para que lo entiendas todo sin problemas.

-¿Se puede ver bien en el móvil? -preguntó Ballestá.

-Mejor en un PC porque con el móvil casi no se ve nada sin perder la paciencia, y además cuando entres con un PC tienes que fijarte,  antes de entrar en pantalla completa, si en la parte baja de la pantalla pequeña sale una ruedecilla con las siglas HD en rojo, ya que si  no salen dichas siglas hay que presionar sobre ella y elegir dicha alta definición. 

Ballestá se fue hacia su coche, sacó del maletero su reluciente portátil y siguiendo lo que le había indicado llegó hasta los videos y pudo observar lo siguiente:

1.- Video PRESENTACIÓN

2.- Video INTRODUCCIÓN

3.- Video KERNEL (Corazón del Sistema)

4.- Video POSICIONAMENTO

5.- Video SIMULADOR para Empresas

Me negué a que pusiera en marcha ya el primer video, porque estando yo presente podría influirle y lo que interesaba es tener su opinión sobre si se entendían o no las grabaciones cuando él las viera en solitario. También le advertí que faltaba un video que se llamaría “ejemplos operativos”, que tratarían sobre la forma de que proceder para descargar el programa, como crear tablas de datos y/o traspasarlos  desde o hacia Excel, etc. y que seguramente habría que pulir bastantes cosas antes de colocarlo todo en la nueva web dedicada al programa  consultor.

-¿Cual crees que es nuestro público objetivo? -le pregunté finalmente.

-Más que las empresas, pienso que el público objetivo son los gestores, sí, los gestores de toda la vida de los que hay miles por ahí, que  de buena fe intentan ayudar a sus clientes, tradicionalmente pequeñas empresas, pero que a veces no saben qué decirles en cuanto a la estrategia a seguir frente a un deterioro de los datos contables del cliente, y tampoco pueden pedirle que se embarque en los costos  excesivos que incurriría si lo dirigen a una empresa de consultoría. -Y continuó diciendo… -Además es más fácil que nos manden datos a procesar un gestor que una empresa ya que el gestor tiene ya los datos y puede mandarlos con  una clave de referencia y así, solo él puede saber a quéd empresa pertenecen los datos mandados y los datos procesados recibidos.

-Vaya, que necesitamos prescriptores -le contesté.

-Sí,  pero lo que me gusta más es que con los procesos podemos eliminar errores típicos de las pequeñas empresas por falta de  reflexión estratégica, y la verdad es que  los procesos que he visto ahora han sido como un alto en el camino para reflexionar sobre lo  que hacemos o pensábamos hacer y eso siempre es conveniente.-

Sonrió y dijo, –el gestor actuaría como el médico que pide un análisis de sangre antes de decirte algo.

 C O N T I N U A R Á